Cayó capo de la mafia italiana en Misiones
Se trata de un miembro de la familia Mancuso, líder de la ’Ndrangheta, que maneja el envío de cocaína colombiana a Europa.
Fuente: La Voz
isiones. Un ciudadano italiano que era buscado por Interpol acusado de ser un capo de la mafia fue detenido en la ciudad misionera de Puerto Iguazú cuando estaba por abandonar el país con un documento falso, informaron fuentes de Gendarmería Nacional.
El detenido, sobre quien pesaba una orden de captura internacional, fue identificado como Pantaleone Mancuso (47), quien fue sindicado como integrante de la mafia calabresa ‘Ndragheta.
La detención, que recién trascendió en las últimas horas, se concretó el 29 de agosto, cuando Mancuso intentaba salir del país a través del puente internacional Tancredo Neves, que une la ciudad argentina de Puerto Iguazú con la brasileña Foz de Iguazú.
El personal de la Dirección Nacional de Migraciones notó irregularidades en su documento, por lo que dio intervención a Gendarmería, que lo detuvo y le secuestró una importante cantidad de euros.
En su descargo, dijo que era un turista que “sólo quería visitar la ciudad brasileña”.
El juez federal de Eldorado, José Luis Casals, tomó intervención y autorizó a tomar las huellas digitales de Mancuso para cotejarlas.
De esta manera, se pudo establecer que el italiano era buscado por Interpol desde hace más de un año y medio, ante la sospecha de que era el jefe de la mafia calabresa conocida como ’Ndragheta.
Según se sospecha, Mancuso estaría a cargo del brazo de esta asociación en Colombia.
Si bien su captura sucedió el pasado 29 de agosto, “no se sabe cuándo ni por dónde Mancuso ingresó al país, aunque suponen que pudo haber sorteado los controles con documentaciones apócrifas, o bien lo hizo de manera clandestina. En su poder tenía 100 mil euros”, según consignó el diario misionero El Territorio.
Mancuso quedó alojado en una celda aislada de la Policía Federal de Iguazú, incomunicado, y se estima que en los próximos días sea trasladado bajo una fuerte custodia a un penal de máxima seguridad hasta ser extraditado a Italia, donde tiene causas por contrabando de cocaína enviada desde Colombia a Europa y Estados Unidos, pasando por Argentina.
Hace unos años, el sociólogo italiano Francesco Forgione, expresidente de la comisión antimafia del Parlamento de su país, publicó Mafia export (come ’Ndrangheta, Cosa Nostra e Camorra hanno colonizzato il mondo), en el que expuso el carácter transnacional del tráfico de drogas, monopolizado por tres grandes mafias: la Camorra, la ’Ndrangheta y la Cosa Nostra.
A través de información proporcionada por la Dirección Central de Servicios Antidroga de la Policía Nacional Italiana, Forgione apunta que Argentina es una de las vías de salida de la cocaína a Europa, con especial participación de la ’Ndrangheta.
El día en que el Papa los excomulgó en público
Nota relacionada: http://www.losprincipios.org/difusion/francisco-enfrento-a-la-mafia-calabresa.html
Tras la muerte de un niño de 3 años, en un ajuste de cuentas de la ’Ndrangheta, Francisco los cuestionó con dureza.
El domingo 6 de julio último, unos 200 mafiosos que cumplen condena en la cárcel de máxima seguridad de Larino, en la región de Molise, no fueron a la misa dominical, rompiendo con el ritual, en protesta por la decisión del papa Francisco de excomulgar a la ’Ndrangheta, una organización menos conocida pero más rica y violenta que la Camorra o la Cosa Nostra.
La decisión del Sumo Pontífice había sido tomada luego de que en enero un niño de tres años muriera en un ajuste de cuentas con su familia.
El desafío de la ’Ndrangheta, ante la postura de Francisco, fue doble: mientras los mafiosos presos no iban a misa, en Oppido Mamertina, un pueblo de apenas 6.000 habitantes en la región de Calabria, una procesión se frenó con la imagen de la Virgen María frente a la casa de un viejo capo, condenado a cadena perpetua por delitos de extorsión y asesinato.
Quince días antes, el Papa ante más de 200.000 personas había asegurado que la ’Ndrangheta era “la adoración del mal, el desprecio del bien común”. “Tiene que ser combatida, alejada. Y la Iglesia tiene que ayudar más. Los mafiosos no están en comunión con Dios. Están excomulgados”, fue el duro reproche.
Fuente: La Voz